En un comunicado conjunto, los organismos expresaron su preocupación por los nuevos hallazgos sobre Pegasus, usado para espiar a periodistas, defensores de derechos humanos y líderes públicos de oposición al gobierno.
Además, solicitaron a las autoridades la adopción de las medidas necesarias para respetar, proteger y garantizar el derecho a la intimidad y la libertad de expresión de los ciudadanos, el ejercicio del periodismo, la defensa de los derechos humanos, la participación ciudadana y las garantías a la oposición política.
Los organismos destacaron que la investigación debe incluir la identificación completa de las víctimas de espionaje o intento de espionaje, así como la posibilidad de informarlas.
Recordaron lo señalado por la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, quien dijo que es sumamente preocupante el uso de software.
La CIDH y ONU-DH reiteraron el llamado de una «moratoria inmediata» a la venta, transferencia y uso de tecnología de vigilancia hasta que se establezcan marcos regulatorios acordes con los derechos humanos.
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