A través de un comunicado, Alfonso Durazo respondió al reportaje publicado en Latinus y señaló que su patrimonio lo ha ganado con su “trabajo legítimo”.
“Como funcionario público federal, he presentado puntualmente mis declaraciones fiscales, patrimoniales y de intereses. Dicha información ha sido revisada-durante años- por la Secretaría de la Función Pública, organizaciones de sociedad civil, medios de comunicación y adversarios políticos. Porque no ‘oculto cosas’, en mi declaración específico claramente la existencia de la empresa Alta Sierra y la participación en ella de mi cónyuge y de mis dos hijos”, indicó.
Asimismo, Durazo refirió que “no se puede ocultar lo que es público” y que los registros de la propiedad “claramente” indican que alguna vez participó en esa empresa con otros accionistas, pero que ahora ya no forma parte de ella.
El exsecretario de Seguridad mencionó que en documentos públicos se establece “claramente” el valor de los inmuebles, “mismos que están fuera de toda realidad con lo planteado en el reportaje”. Puntualizó que todas las operaciones de Alta Sierra han sido lícitas y públicas.
“Dado que todo esto se presenta en el contexto de la campaña política por la gubernatura de Sonora, agregó que hasta ahora he sido el único contendiente por la gubernatura del estado de Sonora que ha presentado su declaración 3 de 3 (...) Dudo mucho que mis adversarios tengan la integridad para hacerlo”, señaló Durazo.
De acuerdo con el reportaje de Latinus, Alfonso Durazo ha ocultado que es dueño de nueve propiedades en México y Arizona, Estados Unidos, las cuales ascienden a 214 millones de pesos.
Para esconderlas, Durazo Montaño usó la empresa Inmobiliaria Alta Sierra S.A. de C.V. en la que aparecen como accionistas su esposa y sus dos hijos, pero que él, según el cronograma, se desempeñó como administrador único cuando se realizaron la mayoría de las compras.
De las propiedades no declaradas por el morenista, destacan un rancho de mil hectáreas, locales comerciales, un edificio del que renta 500 metros cuadrados a la Secretaría de Seguridad Pública de Sonora, y una casa en Bahía de Kino adquirida por la inmobiliaria a Amado Carrillo Barragán, hijo del narcotraficante Amado Carrillo Fuentes "El Señor de los Cielos".
El patrimonio de Durazo se ha erigido durante sus encargos como funcionario público por más de 20 años, no obstante lo ha mantenido fuera de sus declaraciones patrimoniales, incluso como secretario de Estado del presidente López Obrador, refiere el trabajo periodístico.
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