Putin exige a Ucrania el 20% de su territorio para terminar la guerra

Moscú, 16 junio 2024. En una declaración que sacudió al mundo, el presidente ruso Vladimir Putin estableció sus condiciones para poner fin a la guerra con Ucrania. Durante una reunión con altos funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Putin fue claro: Ucrania debe ceder el 20% de su territorio, incluyendo las regiones de Donietsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia, y renunciar a su aspiración de unirse a la OTAN.

Las respuestas no se hicieron esperar. Kiev, Washington y Bruselas rechazaron de inmediato las demandas de Putin. Mikhailo Podolyak, asesor de la presidencia ucraniana, calificó la propuesta como un "paquete estándar de un agresor". Mientras tanto, el secretario estadounidense de Defensa, Lloyd Austin, declaró que Putin no tiene derecho a dictar los términos de paz y que debería retirar sus tropas para acabar la guerra.

Según Putin, la paz solo se logrará si Ucrania retira sus tropas de las regiones mencionadas y renuncia a sus planes de unirse a la OTAN. Además, exige que Ucrania se proclame un país neutral, sin armas nucleares, y asuma compromisos de desmilitarización y desnazificación. Putin también insiste en que los derechos de los ciudadanos rusoparlantes en Ucrania sean plenamente garantizados y que Crimea, Sebastopol y las repúblicas autoproclamadas de Donietsk y Lugansk sean reconocidas como parte de Rusia.

Lloyd Austin y Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN, criticaron duramente las exigencias de Putin. Austin argumentó que la verdadera solución es la retirada de las tropas rusas del territorio soberano ucraniano. Por su parte, Stoltenberg calificó la propuesta de Putin como una "propuesta de más agresión", subrayando que obligaría a Ucrania a ceder aún más territorio del que ya ocupa Rusia.

El anuncio de Putin precede a la Conferencia por la Paz Global que se celebra en Suiza. Putin desestimó la importancia de esta conferencia, anticipando que se trataría solo de "conversaciones vagas y demagógicas". No obstante, la comunidad internacional sigue buscando soluciones diplomáticas para un conflicto que ya ha cobrado demasiadas vidas y ha generado una crisis humanitaria significativa.

Putin también aprovechó la ocasión para abogar por la creación de un sistema de seguridad indivisible para Eurasia, que incluiría a todos los países dispuestos a participar, incluso miembros de la OTAN. Esta propuesta busca promover la retirada paulatina de la presencia militar extranjera en la región y establecer un compromiso de seguridad multilateral.

Las demandas de Putin representan un punto crítico en las negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania. Mientras tanto, la comunidad internacional observa con atención y preocupación los desarrollos de la situación en la región, esperando que la diplomacia y el diálogo prevalezcan sobre la guerra y la agresión.