En un reciente operativo realizado en San Luis Río Colorado, Sonora, las autoridades detuvieron a tres personas identificadas como Iván Alfonso “N”, Carlos Alberto “N” y Félix Aarón “N”, presuntos generadores de violencia en la zona.
El origen de este conflicto se remonta a la fractura dentro del Cártel de Sinaloa, donde Los Salazar, quienes inicialmente trabajaban junto a Los Chapitos, se separaron y comenzaron una sangrienta disputa por el control del territorio. Por su parte, Los Rusos, bajo la protección de "El Mayo" Zambada, intentan consolidar su poder en el norte de México, específicamente en Sonora y Baja California.
Los enfrentamientos entre ambas facciones han generado una ola de violencia que ha obligado a las autoridades a implementar operativos conjuntos entre la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional y la Marina, con el objetivo de controlar la situación y capturar a los líderes de estas organizaciones.
Durante el operativo en San Luis Río Colorado, las fuerzas de seguridad lograron la detención de tres sujetos involucrados en la guerra entre Los Rusos y Los Salazar. Iván Alfonso “N” y Carlos Alberto “N” fueron acusados de asociación delictuosa y allanamiento de morada, mientras que Félix Aarón “N” enfrenta cargos por la posesión de un vehículo robado. A los detenidos se les decomisaron armas de fuego, chalecos balísticos, vehículos y teléfonos celulares.
Las detenciones se realizaron tras una serie de enfrentamientos en los que las autoridades respondieron de manera inmediata para asegurar la zona y prevenir un mayor derramamiento de sangre. Según la Fiscalía General de Justicia de Sonora, el operativo se coordinó con efectivos de la Sedena y la Policía Estatal, logrando importantes avances en la lucha contra estos grupos criminales.
Además de las detenciones, la Fiscalía de Sonora informó sobre el desmantelamiento de un sistema de videovigilancia instalado ilegalmente por Los Rusos para monitorear los movimientos de las autoridades y controlar el territorio. Estas cámaras fueron retiradas de diversos puntos de San Luis Río Colorado, y las investigaciones continúan para identificar a los responsables de su instalación.
Ante el peligro de que la violencia se extienda a otras regiones, las fuerzas de seguridad han reforzado la vigilancia en la frontera con Baja California, con el fin de frenar el avance de Los Salazar hacia el estado vecino.
Con la captura de estos tres criminales, las autoridades esperan desmantelar parte de la estructura de poder de estos grupos, pero aún queda mucho por hacer para restablecer la paz en la región.
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