En su sitio web, Terralago, avalado por la presidencia municipal de Naucalpan, se promociona como un proyecto único, ubicado en la zona más exclusiva de Lomas Verdes, ofrece lotes residenciales de 200 metros cuadrados desde 3.6 millones de pesos. El proyecto indica que cuenta con más de 75 mil metros cuadrados destinados a parques, jardines, plazas y áreas recreativas.
El Cerrito es un predio que ya había sido defendido en la primera administración de la actual presidenta municipal Angélica Moya (2006 – 2009). En aquel entonces, la política de extracción panista cedió ante las presiones ciudadanas e incluso promovió que este sitio se declarara como Área Natural Protegida.
El abogado Miguel Miramontes encontró que la Conagua autorizó rehabilitar dos pozos y abrir uno más para satisfacer la demanda del nuevo proyecto residencial, sin los estudios técnicos de factibilidad, argumento por el que el Juzgado Cuarto de Distrito en el Estado de México suspendió provisionalmente el desarrollo inmobiliario.
“Esto está totalmente fuera de la ley, porque la Ley de Aguas Nacionales, señala que cuando haya un impacto significativo, debe de hacerse un estudio regional, debe de verse si los mantos freáticos están en posibilidad de dotar el agua”, dijo el abogado.
Mientras las obras se ejecutaban desde hace medio año, la misma alcaldía difundió que dejó de recibir 36.4 millones de litros de agua del Sistema Cutzamala diariamente, por lo que un nuevo conjunto residencial, pondrá en jaque a la región, pues del Cutzamala dependen Naucalpan, Atizapán, Tlalnepantla, Tepoztlán, Cuautitlán, entro otros municipios aledaños.
De acuerdo con el abogado, tras obtener la suspensión provisional, se realizará el estudio de la audiencia incidental para lograr la suspensión definitiva. El abogado Miguel Miramontes, el mismo que logró derribar el desarrollo Bosque Diamante que se pretendía edificar dentro del Gran Bosque de Agua en el municipio de Jilotzingo, es el autor de esta nueva demanda de amparo que no sólo es impulsada por vecinos, sino por niñas y niños de la zona. Todos demandan el respeto a sus derechos humanos al agua y al medio ambiente sano.
“Esto es una crónica de una muerte hídrica para todos por qué, porque si no se sabe cuánta agua hay entonces se tiene que aplicar el principio precautoria en materia ambiental. Conagua y los organismos de agua estatal y municipales, porque es obligación transversal, nos tiene que garantizar la sostenibilidad para generaciones presentes y futuras. Ellos tienen que probar, que con documentos científicos, aforos, y conocimientos hídricos, están en posibilidades de dotar agua por medio de pozos”.
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