La legisladora, integrante de la Comisión Electoral y de Desarrollo Democrático, expuso que de acuerdo con diversos testimonios de beneficiaras de la Tarjeta Rosa, para acceder al apoyo deben formar parte de una gran estructura con fines electorales, creada en 2018 con un presupuesto de 1,696 millones de pesos y que para el 2022 aumentó casi al triple a 4,934 millones de pesos.
La estructura de Salario Rosa es operada por una red de promotoras territoriales, enlaces, gestoras, asignadas de acuerdo a las secciones electorales y el padrón general de beneficiarias que llega a 700 mil mujeres.
El PRI apuesta a esta estructura para ganar votos, subrayó Hernández, a cinco meses de que concluya el gobierno estatal y mantiene bajo amenazas e intimidación a los cientos de miles de beneficiarias que requieren un apoyo estatal por ser madres de familia, por tener un hijo o hija discapacitado o ser estudiantes, pues están obligadas a acudir a mítines del PRI, a respaldar a Alejandra del Moral, y si hay eventos de Morena en alguna región son citadas en lugares cercanos por varias horas para impedir que vayan.
“Lo que están haciendo de presionar, de intimidar a las mujeres que reciben el apoyo de la Tarjeta rosa, se les va a revertir, porque hoy el pueblo está informado, está preparado para este cambio y creo que esta revolución de conciencias ha dignificado la política desde la base social”, advirtió la morenista.
LuzMa Hernández lamentó que todos los eventos de Salario Rosa que encabezó el Gobernador tengan el claro control clientelar de las mujeres, con vítores al mandatario y una actitud de servilismo, tal como lo relatan beneficiarias en redes sociales, y quienes también están obligadas a seguir en sus redes a Alfredo del Mazo, dar like y comentar todas sus acciones.
Además del control clientelar del Salario Rosa, el programa emblemático del Gobernador Alfredo del Mazo ha sido un fracaso para el desarrollo de las mujeres mexiquenses, porque no hay una estrategia preventiva, afirmó la diputada de Morena, y no ha podido frenar la violencia de género, pues cada año fue en aumento, y en carpetas de abuso sexual, pasó de 1977 casos en 2018, a 4,071 denuncias en 2021, mientras que la violencia familiar escaló al pasar de 6,496 denuncias en 2018, a 22,139 casos en 2021.
Por ello, a diferencia de la del PRI, la propuesta de la maestra Delfina Gómez es mantener los programas en beneficio a mujeres, pero de manera libre, sin chantajes políticos, y que pueda acceder quien cubra los requisitos, no por recomendación o control de operadores políticos, así como políticas públicas que atiendan de fondo el problema de las mujeres.
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