La víspera, el coordinador de los diputados del tricolor, Rubén Moreira, expresó que a su juicio la cercanía familiar y política de las aspirantes a presidir al instituto con Morena no era algo que objetar.
Horas más tarde, la Comisión Permanente Nacional del Partido Acción Nacional (PAN) anunció su rechazo al proceso de selección realizado por el Comité Técnico de Evaluación.
Los panistas cuestionaron “la falta de idoneidad de diversos perfiles por falta de conocimiento en materia electoral, estrechos vínculos con Morena y parentesco con funcionarios gubernamentales”.
Además, trascendió que en la reunión panista se alertó sobre la postura de Moreira y un eventual voto del PRI para las designaciones en el INE, ante lo cual el líder nacional panista, Marko Cortés Mendoza, habría advertido que la alianza entre el PAN, el PRI y el Partido de la Revolución Democrática en el Estado de México y Coahuila estaría en riesgo.
Por eso este martes el dirigente priista, Moreno Cárdenas, dejó clara su postura en un mensaje en su cuenta de Twitter:
“No podemos permitir que Morena tenga las manos metidas en este importante proceso” por lo que las y los diputados del tricolor -dijo- votarán en contra de las propuestas para consejeros y presidenta del Instituto.
“La autonomía e imparcialidad del órgano electoral no puede ni debe estar en duda”, escribió.
Si las bancadas del PAN y del PRI en la Cámara de Diputados no respaldan las propuestas de Morena y sus aliados, no habrá mayoría calificada necesaria para los nombramientos, pero la Constitución y la ley prevén un proceso de insaculación (tómbola) para elegir las tres consejerías y la presidencia del INE.
En caso de que esto tampoco sea posible, las quintetas serán remitidas a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que será responsable de realizar la elección de las personas para cubrir las vacantes en el INE, por insaculación o tómbola.
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