De acuerdo con varios medios de comunicación, que tuvieron acceso al menú, los mandatarios degustaron varios platillos con productos originarios de México.
En primer lugar se les ofreció una tortilla inflada de maíz, con aguacate, maíz cocido y queso fresco.
Posteriormente, se sirvió una sopa de milpa a base de granos de maíz con hortalizas típicas como champiñones, epazote y flor de calabaza.
Como plato fuerte se ofreció un filete de pescado con salsa de flor de calabaza, con una guarnición de arroz con chipilín y verduras al vapor. Los mandatarios y sus esposas también pudieron elegir un bistec de res en salsa de moritas o con salsa de alcachofas, crema de yuca y calabaza criolla. En este caso, existió la alternativa de que los platillos fuesen preparados con mucho o poco picante.
Finalmente se sirvió de postre un tamal relleno de chocolate o bien, un merengue con cítricos y crema de guayaba criolla.
De beber se ofreció agua mineral o natural, agua de matalí (una hierba originaria de Tabasco) o de mandarina con menta, vino tinto y blanco, café hidalguense o oxaqueño, infusiones y otras alternativas.
Minutos después de las 21:00 horas se apreciaron los equipos de seguridad saliendo de Palacio Nacional.
Entre el convoy de vehículos de seguridad destacó La Bestia, el auto blindado en el que viaja el presidente de Estados Unidos, rumbo a un hotel de Polanco.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, salió en otra caravana de seguridad.
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