“En todo caso, la traición contra Madero ayuda a entender el porqué de nuestra estrategia política; si no estuviéramos respaldados por la mayoría de los mexicanos y en especial por los pobres, ya nos habrían derrotado los conservadores o habríamos tenido que someternos a sus caprichos e intereses para convertirnos en simples títeres o peleles, de quienes ya se habían acostumbrado a robar y a detentar el poder económico y político en nuestro país. Ya se sentían los dueños de México”, dijo el titular del Ejecutivo.
El presidente López Obrador narró diferentes episodios de la historia que generaron el movimiento de 1910 en México, por lo que al llegar al capítulo maderista, realizó la similitud con su administración.
“El comportamiento de la oposición durante el gobierno democrático, legal, legítimamente, del presidente Madero, es muy aleccionador de cómo los de arriba, los oligarcas, la mayoría de la prensa, los intelectuales acomodaticios y los políticos corruptos, suelen ser amigos de mentira y enemigos de verdad.
“Como revolucionario y después como presidente, Madero actuó con rectitud, congruencia y respeto a las libertades, pero por lo complejo del asunto o por error político, no logró hacerse de una base social para sostener su proyecto democrático y enfrentar así a la reacción conservadora”, narró el presidente.
Previo a la ceremonia oficial, el primer mandatario realizó el izamiento de la Bandera Monumental de la Plaza de la Constitución, escoltado por los secretarios de la Defensa Nacional, general Luis Cresencio Sandoval González, y de Marina-Armada de México, almirante José Rafael Ojeda Durán.
Posteriormente, en un jeep del Ejército Mexicano, el presidente López Obrador, con los dos mandos militares, realizó el pase de revista al personal formado en la plancha del Zócalo, y que participó en el desfile militar.
Ya en el presídium, instalado en frente al Palacio Nacional, el presidente estuvo acompañado de su gabinete; de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum; del presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel, y del presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ministro Arturo Zaldívar, entre otros.
En la ceremonia se entregaron ascensos, reconocimientos y preseas a personal de la Sedena, la Marina y la Guardia Nacional, entre otras cosas, por destacar en actividades deportivas.
El presidente López Obrador afirmó que se seguirá contando con el apoyo de las Fuerzas Armadas para las tareas de seguridad pública y defensa de la soberanía.
El mandatario destacó que con las reformas constitucionales, el apoyo del Ejército y la Armada de México ayudará a garantizar la seguridad pública y a consolidar a la Guardia Nacional.
Con las nuevas reformas a la Constitución, el Ejército y la Armada nos continuarán apoyando en labores de seguridad pública y la Guardia Nacional se terminará de consolidar bajo la dirección de la Secretaría de la Defensa”, afirmó el presidente López Obrador.
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