La estrategia liderada por la Dirección de Medio Ambiente busca que se mantenga la conservación de las áreas naturales protegidas de León como lo es Sierra de Lobos.
Este fin de semana se realizaron actividades de plantación en la comunidad Mesa del Obispo, en donde se plantaron 500 árboles como: encino, roble, huizache, ocotillo y palo verde, siendo esta la tercera reforestación realizada en el año.
La dependencia ha realizado esta actividad en otras dos comunidades, Sauz Seco y Barbosa, con un total de 5 mil 500 árboles plantados en las tres reforestaciones.
“El objetivo es realizar estas reforestaciones en comunidades donde exista un compromiso de apoyar con sistemas de captación de agua de lluvia a fin de dar seguimiento al cuidado de los árboles plantados”, informó la dependencia.
Según el estudio “Evolución del matorral en el sur del Área Natural Protegida Sierra de Lobos, Guanajuato”, desde el 2007 se tienen detectados niveles de deforestación en la zona.
El estudio señala que los pastizales y el bosque de encino disminuyeron en superficie, con un 6 y un 2.5 % respectivamente.
“Estas disminuciones tuvieron como consecuencia el establecimiento de vegetación secundaria, principalmente en forma de matorral. El incremento de la superficie cubierta con matorral, ha limitado a poblaciones vegetales como el bosque de encino y pastizales, así como áreas agrícolas. Se entiende que parte de este problema fue causado por la apertura y el posterior abandono de tierras de cultivo”, señala el estudio.
En esta área natural hay un incremento de un 24.99% a un 53.84% de la superficie cubierta por matorral, solo en el periodo de 1974 a 2007.
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