La riña se suscitó cuando los migrantes caribeños pretendieron brincar las vallas metálicas instaladas en los accesos a las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), e ingresar por la fuerza al inmueble, como lo hicieron el pasado miércoles, cuando bloquearon la entrada y provocaron la interrupción del servicio al público.
Manifestantes y policías que formaban una valla humana, equipados con escudos, se enfrascaron y enfrentaron a jalones y empujones afuera del edificio ubicado en la calle de Versalles número 49, en la colonia Juárez, lo que provocó que una mujer haitiana, de 27 años se desmayara y permaneciera en el pavimento algunos minutos, hasta que fue atendida por elementos del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM).
Pasados los momentos de tensión, la policía controló la situación y funcionarios de la Comar dialogaron con los migrantes para explicarles que todos serán atendidos, pero con orden y la aplicación de medidas sanitarias para evitar la propagación de la Covid-19.
Detalló que con apoyo de un intérprete del creole, la lengua nativa de los migrantes que protestaron, la funcionarios de la Comar mantuvieron diálogo abierto con el grupo de aproximadamente 80 personas, donde se comprometió a dar que la atención individualizada de los casos.
Migrantes denuncian que llevan seis meses esperando que sus solicitudes de asilo sean atendidas; funcionarios aseguran que todos serán atendidos.
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