Lo anterior, corresponde a una legislación que se discute actualmente en el Congreso de EU como parte del paquete de reconciliación presupuestaria 2021-2022, con la que se busca otorgar beneficios económicos a quienes compren vehículos ensamblados en la Unión Americana bajo el argumento de acelerar la introducción de esta tecnología amigable con el medio ambiente.
Los embajadores en EU destacaron que este tipo de prácticas, en lugar de resultar una vía óptima para la protección ambiental, trata de manera discriminatoria a las empresas automotrices extranjeras y actúa en detrimento de los compromisos comerciales internacionales adquiridos por la administración estadunidense.
Explicaron que el diseño legislativo propuesto entra en conflicto con el objetivo de alcanzar un rápido despliegue de nuevas tecnologías sostenibles, ya que las condiciones planteadas reducirían las opciones de los consumidores de Estados Unidos a sólo dos vehículos que serían elegibles, entre más de 50 autos eléctricos disponibles.
“De particular importancia para México, se advierte que, de adoptarse esta medida, violaría los acuerdos negociados y alcanzados en el T-MEC, además de amenazar el espíritu y buena voluntad plasmados en el acuerdo comercial”, indica un comunicado de prensa emitido por la Embajada de México en Estados Unidos.
Agregó que esta acción iría contra el deseo de construir una relación comercial entre los socios de América del Norte basada en la confianza y en el impulso a una agenda comercial y de inversión positiva.
El llamado de los embajadores busca que Estados Unidos reconsidere la adopción de esta ley y proponga una vía alterna para acelerar la adopción de vehículos eléctricos, que no considere incentivos que resulten discriminatorios contra algún país o productor.
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