“Estaré hoy en El Paso con los familiares de las víctimas de aquel acto brutal acaecido el 3 de agosto de 2019, en el que perdieron la vida 23 personas, la mayoría connacionales. Ahora como entonces, México condena la violencia, el racismo y el odio que sólo conducen a la tragedia”, dice el tuit.
En aquel momento, el gobierno mexicano calificó el ataque como un acto terrorista. Y se reportó que el responsable, identificado como Patrick Wood Crusius, era un supremacista blanco que viajó desde Austin hasta El Paso para acabar con la mayor cantidad de latinos posible.
En el tiroteo murieron 23 personas, incluyendo a 9 mexicanos.
Hasta la fecha, el caso está en juicio y los familiares de las víctimas buscan que los juzgados aprueben una pena capital para el responsable mientras que la defensa alega «problemas mentales» para conmutar la sentencia a una vida en prisión.
Las autoridades tanto de México como de Estados Unidos recordaron este hecho en sus redes sociales y refrendaron el compromiso de hermandad que existe entre Ciudad Juárez y El Paso.
Uno de los compromisos que se refrendaron hoy es el de la protección a todos los latinos en Estados Unidos y no dejar que la xenofobia y el extremismo rompa los lazos de hermandad que existen entre ambas naciones.
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