Luego de que se discutiera la iniciativa, con ocho votos a favor, seis en contra y dos abstenciones, la iniciativa fue rechazada.
Cabe señalar que para que la iniciativa fuera aprobada, requería de una votación mayoritaria de 12 votos, por lo que se quedó a cuatro sufragios positivos para legalizarla.
La iniciativa planteaba reformar artículos del Código Penal de Baja California Sur y de la Ley de Salud estatal.
La propuesta indicaba que los institutos de salud públicos realizarán la interrupción legal del embarazo de forma gratuita y en condiciones de salubridad.
“El aborto no es una interrupción. Es hablar de liquidar o extirpar para ocultar a la sociedad el embarazo. ¿Cómo obligar a un médico practicar a un aborto, si prometió cuidar la vida? ¿Por qué legislar en contra de la vida?, dijo la diputada del PAN, Elizabeth Rocha, en su intervención.
Durante la sesión del Congreso, alrededor de 20 manifestantes se ubicaron afuera del recinto legislativo para expresar su apoyo a la despenalización del aborto.
Por su parte, María Mercedes Maciel, presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de Baja California y diputada por el PT, indicó que el tema no era religioso o moral.
Por lo que señaló a sus colegas que debía ser considerado “un tema de salud pública”.
Hasta hoy, la penalización de la que han sido objeto las mujeres que han interrumpido sus embarazos no ha resuelto este problema porque se siguen muriendo mujeres por realizarse abortos clandestinos”, sostuvo.
Actualmente, sólo la Ciudad de México y Oaxaca son las entidades que permiten la interrupción del embarazo dentro de las primeras 12 semanas de gestación.
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